Primera visita a la expo de MIRALDA en la casa de Velázquez del Retiro. Al entrar, el cuerpo nota
inmediatamente la presencia de un arte complejo. La presencia de un arte que te
atrapa y te moviliza. El espacio está colonizado casi en su totalidad, lo que
convierte la exposición en una gran instalación. Transitar por los espacios es un
viaje en la vida de Miralda a través de las diferentes formas de representación
de las que se sirve; dibujos, manuscritos, fotos, videos
en varios formatos, cientos de objetos, grafías, muebles e instalaciones, componiendo la suma de varias formas la idea global. Las ideas formas se van sumando entre sí
y giran en torno a las obsesiones y fascinaciones de Miralda (comida, guerra,
violencia, cuerpo, sexo, animales, utensilios, mobiliario, órganos, cultura pop,
cultura junk) y alguna reminiscencia posmoderna en la gran escala de algunos
elementos centrales. Las habitaciones laterales son las zonas mas densas y
compactas, donde la definición plástico-conceptual de cada idea está mas
definida. Hay una habitación con una gran lengua de lenguas y una estantería
inmensa de cajas de plástico con pantallas con programas basura. Otra con
grupos de mesas y sillas tatuadas con mensajes icónicos, mensajes palabra,
ideas que saltan al y del objeto. Otra habitación oscura con textos y maquetas
con cúpulas de plástico transparente que encierran animales y soldados en movimiento
perpetuo. Hay cientos de ideas en la veintena de espacios con definición propia,
además de ideas puente, los cuerpos escultóricas, que ocupan los tránsitos. Entre
todas las formas, hay una habitación que sobresale, una idea maestra, la
habitación idea, la idea maquina de transmisión, LAPIEZA que te habita y qye te llevas. Esta idea es una
habitación altísima, donde las paredes se han empapelado íntegramente y donde
los cuadros colocados sobre el empapelado, son del mismo empapelado y quedan camuflados en la pared,
y donde además, hay una serie multiforme de obras generadas con la acumulación de
miles de soldaditos de plástico blanco sobre variadas formas objetuales
significantes, donde la combinación irradia ese arte que buscamos como el agua fresca. Gran arte. La idea ya tiene décadas, es un remake de otro show, un recuerdo retrospectivo, pero como la gran literatura, no caduca. Gracias Miralda ! LLOVERAS > 24.06.10