Wednesday, November 12, 2025

La Herida que Piensa

 





Nastassja Martin irrumpe en el panorama contemporáneo como una voz que desestabiliza las fronteras entre el sujeto y su entorno, una autora que convierte la herida en prisma epistemológico desde el cual mirar el mundo; sus dos libros más significativos, Croire aux fauves y À l’est des rêves, son verdaderas etnografías poéticas del umbral, donde la autora narra su encuentro con un oso en Kamchatka como una colisión radical entre mundos —lo humano y lo animal, lo occidental y lo chamánico, lo racional y lo onírico— pero también como el nacimiento de una sensibilidad que ya no puede escindirse del dolor ni de la alteridad, una sensibilidad que acepta la transformación como forma de conocimiento y se entrega al devenir híbrido que de allí se deriva, en este sentido Martin no observa al otro: se deja afectar, se fragmenta, y desde esa fragmentación escribe, reconstruye, canta, en el segundo libro profundiza en su vínculo con los pueblos evenes y allí el sueño emerge como método, como topografía política donde lo invisible se vuelve operativo y lo personal es inseparable de lo cósmico, en ambos casos la antropología deviene arte del tránsito, escritura encarnada que se resiste a toda clausura disciplinaria, y su lectura instala al lector en una experiencia liminar donde el pensamiento no se explica: acontece, tenerla como referente es afirmar una postura ética ante el mundo, una apuesta por la vulnerabilidad lúcida y la escucha radical que, lejos de idealizar lo salvaje, lo reconoce como parte constitutiva de nuestra fragilidad compartida.