Su trabajo se centra en la vida cotidiana, la cosmovisión y la historia del pueblo sami, a través de bordados, grabados, esculturas e instalaciones que combinan elementos autobiográficos, colectivos y políticos; usa la técnica del bordado como medio principal, con composiciones narrativas sobre lino donde se representan escenas que incluyen paisajes, rituales, animales, figuras humanas y momentos históricos como protestas o represiones estatales; su obra más conocida es un gran bordado que recorre la historia del pueblo sami en escenas sucesivas, comparado con el tapiz de Bayeux; fue parte del colectivo artístico Mázejoavku, activo en la defensa de territorios indígenas y opositor a proyectos hidroeléctricos; en sus obras hay referencias a la lengua, la transmisión cultural, el parto, la muerte, la espiritualidad y el entorno natural; creció en una familia dedicada a la cría de renos y estudió arte textil en Suecia, trabajando desde entonces desde el norte del país; su trabajo ha sido expuesto internacionalmente y forma parte de colecciones públicas en varios países nórdicos.